https://blogmobileart.com/2012/05/18/mobile-video-art-cityscreen-to-take-away-el-videoarte-que-te-acompana/
 

Canódromo (2012)

Las imágenes que componen esta pieza fueron rodadas en el 2005, y aunque parezca una aclaración poco necesaria, quizás no lo sea tanto si tenemos en cuenta que, actualmente, no son pocos los creadores que buscan la baja calidad de las imágenes como una simulación de veracidad o por cuestiones puramente estéticas, para lograr imágenes más «pictóricas» explorando lo que en ocasiones se ha llamado «la estética del píxel». Pero detrás de esta pieza se esconden temas que van muy ligados a la propia genealogía de la herramienta, de reducido tamaño que nos dota (y más aún en el año en que se rodaron) de cierta invisibilidad y clandestinidad que nos permite captar la realidad que nos rodea, estemos donde estemos. Pero además, esta pieza rodada en el antiguo canódromo, se presenta como una oportuna metáfora sobre la gestión que los órganos de gobierno llevan a cabo respecto a la cultura en general y al arte contemporáneo en particular.



Mobile video art: citySCREEN to take away es una exposición virtual compuesta por una selección de de piezas rodadas con teléfono móvil que se podrán visualizar online en la página del festival. La selección está compuesta por obras de diferentes artistas y lenguajes estéticos y pretende acercar al público del festival, un año más, la incidencia de este dispositivo en la video-creación contemporánea. A la selección también se podrá acceder desde cualquier dispositivo móvil a través de códigos QR que los usuarios encontrarán distribuidos por la ciudad en los diferentes espacios de proyección.

A nadie se le escapa que la telefonía móvil constituye un auténtico fenómeno social. Su portabilidad, su capacidad aglutinadora de diferentes tecnologías, su potencial como medio de registro alternativo o su accesibilidad son algunas de las principales características que han ayudado a que el teléfono móvil se haya convertido en la tecnología que tiene mayor presencia en la sociedad. Y como una consecuencia natural vemos cómo el móvil, que ha evolucionado hasta convertirse en una plataforma multimedia presente no sólo en nuestra actividad comunicativa, se introduce en las prácticas artísticas de forma progresiva y profunda.

Las posibilidades creativas que los terminales móviles nos ofrecen están, en muchos casos, vinculadas a la producción audiovisual. Al convertirnos en portadores continuos de cámara y pantalla, tenemos la posibilidad en cualquier momento y lugar de registrar lo que nos rodea, por lo que esta tecnología dota a los creadores de una mayor libertad de crear imágenes en movimiento nacidas de un gusto personal espontáneo.

El vídeo móvil posee un lenguaje que va ligado a la naturaleza del dispositivo y a cómo nosotros mismos reaccionamos a ésta, por lo que la interfaz adquiere gran protagonismo en la relación existente entre la herramienta y lenguaje. Enfrentarse a una herramienta nueva abre nuevas vías de experimentación que en el caso del móvil se amplían, al ser ésta una tecnología en la que convergen otras muchas, pero en el caso concreto de la creación audiovisual, esta  experimentación se traduce en la búsqueda de nuevas formas y caminos de representación, nuevos matices que están muy ligados al sentimiento de cercanía y apego que nos produce este aparato tecnológico (no comparable a ninguna tecnología anterior). Por otro lado, cabe destacar que en parte de los trabajos realizados con móvil subyace una reflexión sobre la propia tecnología así como los efectos que causa en la sociedad.

La interfaz móvil dota a los creadores de gran independencia y autonomía si tenemos en cuenta que se trata de una herramienta que no sólo graba y reproduce utilizando una misma pantalla, sino que además permite manipular y editar, archivar, distribuir y publicar gracias a la existencia de Internet, desde el mismo Terminal, convirtiendo así a los creadores en  distribuidores, lo cual facilita, estimula, y de alguna manera, democratiza los procesos de producción.